miércoles, 30 de marzo de 2011

Celebra la Vida





No se si soñaba,
No se si dormía,
y la voz de un ángel dijo que te diga,
Celebra la Vida.

Piensa libremente
ayuda a la gente
y por lo que quieras
lucha y sé paciente
lleva poca carga,
a nada te aferres,
porque en este mundo,
nada es para siempre.
Buscate una estrella,
que sea tu guía,
no hieras a nadie,
reparte alegría.

Celebra la vida,
celebra la vida,
que nada se guarda
que todo te brinda.
Celebra la vida,
celebra la vida,
segundo a segundo,
y todos los dias.

Y si alguien te engaña,
al decir te quiero,
pon mas leña al fuego
y empieza de nuevo.

No dejes que caigan
tus sueños al suelo
que mientras mas amas
mas cerca esta el cielo.

Grita contra el odio,
contra la mentira,
que la guerra es muerte
y la paz es vida.

Celebra la vida,
celebra la vida,
que nada se guarda
que todo te brinda.
Celebra la vida,
celebra la vida,
segundo a segundo.

No se si soñaba,
No se si dormia,
y la voz de un angel dijo que te diga..

Celebra la vida,
celebra la vida,
y deja en la tierra tu mejor semilla.
Celebra la vida,
celebra la vida,
te escucho mas bella
cuando tu me miras.

Celebra la vida,
celebra la vida..

viernes, 25 de marzo de 2011

"Hágase en mi según tu Palabra" (Lc 1, 38)

En medio del desierto que supone la Cuaresma...un pequeño oasis que nos invita a confiar, a fiarnos de aquel que nos tiende una mano... tal y como hizo María, aún en la duda, aún en la penumbra, aún en la dificultad...

“Entonces llamó a un arcángel que San Gabriel se decía, y enviólo a una doncella que se llamaba María, de cuyo consentimiento el misterio se hacía, en el cual la Trinidad de carne al Verbo vestía; y aunque Tres hacen la obra, en el Uno se hacía; y quedó el Verbo encarnado en el vientre de María. Y el que tenía sólo Padre, ya también Madre tenía, aunque no como cualquiera que de varón concebía, que de las entrañas de ella El su carne recibía; por lo cual Hijo de Dios y del hombre se decía”. (Romance 8)


San Juan de la Cruz





Gracias al Hermano Cortés por su viñeta

jueves, 24 de marzo de 2011

Con Monseñor Romero...


"Con Monseñor Romero, Dios pasó por el Salvador"

Esa fueron las palabras que pronunció Ignacio Ellacuría en el funeral que por entonces se ofició en la UCA por Monseñor Oscar Romero. El que fuera "voz de los sin voz" fue asesinado a tiros mientras celebraba la eucaristía, hace hoy 31 años.

Asesinato que muchos contemplamos como el martirio de un hombre que experimentó su propia conversión. Tres años de profunda transformación, desde su nombramiento como arzobispo de San Salvador y su muerte. Tres años de vida pública dónde se enfrentó a los poderosos y consagró la defensa de "los Lázaros" como bandera de su vida.


A falta de poco más de un mes para la beatificación de Juan Pablo II, y sin ánimo de restar virtudes y méritos al Papa Wojtyła, viajero incansable y ejemplo de servicio a la Iglesia, cabe preguntarse qué pasa con la figura de Monseñor Romero, qué pasa con su entrega, con su martirio y con el reconocimiento formal de sus virtudes cristianas. Digo formal porque desde hace años que su pueblo, su gente, lo proclamó "santo súbito", como le pasó recientemente al Papa polaco. Uno ha alcanzado el título de beato en poco más de 5 años... y otro, tras más de 30 años, nada se sabe.

Su tiempo fue un tiempo difícil. El espíritu de la Teología de la Liberación (con profundo sentido en ese enclave geográfico y temporal y por tanto difícil de extrapolar a otras realidades y menos a otros momentos de la historia) era para algunos un tufillo comunista que, decían, poco tenia que ver con el Evangelio de Jesús y su Iglesia.

Política y religión no casan, dicen muchos que todavía hoy se amparan en ese irrisoreo argumento para justificar el paro en el proceso de beatificación de Romero, mientras viven al amparo y los favores del poder político, añorando en ocasiones preevendas y privilegios ya, a Dios gracias, desaparecidos.

Monseñor Romero hizo política, en tanto en cuanto se significó con los oprimidos, tal y como hizo Jesús. Hizo política en tanto que se enfrento a los poderosos, al igual que Jesús. Hizo política en tanto que, en nombre de Dios y su justicia, luchó hasta derramar su sangre por aquellos que nadie escuchaba. Consagró su ministerio a la opción preferencial por los más pobres, piedra angular y eje en torno al cual gira la Buena Nueva de Jesús de Nazareth.

En modo de homenaje y recuerdo a su memoria, comparto con ustedes parte de su última homilía, esa en la que, sin tapujos, fue fiel al mensaje del Evangelio, sin miedo, aun sabiéndose amenzado y perseguido. Palabras que supusieron su condena y que fueron el punto y final de una vida que merece subir a los altares.

Ojalá pronto el pueblo salvadoreño y toda latinoamérica celebre a San Romero de América, que ya hoy, intercede por nosotros.

"Ya sé que hay muchos que se escandalizan de estas palabras y quieren acusarlas de que han dejado la predicación del Evangelio para meterse en política. Pero no acepto yo esa acusación, sino que hago un esfuerzo para que todo lo que nos ha querido impulsar el Concilio Vaticano II, la reunión de Medellín y de Puebla, no sólo lo tengamos en las páginas y lo estudiemos teóricamente, sino que lo vivamos y lo traduzcamos en esta conflictiva realidad de predicar como se debe el Evangelio para nuestro pueb. por eso, pido al Señor durante toda la semana, mientras voy recogiendo el clamor del pueblo y el dolor de tanto crimen, la ignominia de tanta violencia, que me dé la palabra oportuna para consolar, para denunciar, para llamar al arrepentimiento, y aunque siga siendo una voz que clama en el desierto, sé que la Iglesia está haciendo el esfuerzo por cumplir con su misión

Yo quisiera hacer un llamamiento muy especial a los hombres del ejército, y en concreto a las bases de la Guardia Nacional, de la policía, de los cuarteles. Hermanos, son de nuestro mismo pueblo, matan a sus mismos hermanos campesinos, y, ante una orden de matarr que dé un hombre, debe prevalecer la ley de Dios, que dice: no matar. Ningún soldado está obligado a obedecer una orden contra la ley de Dios. Una ley inmoral, nadie tiene que cumplirla. Ya es tiempo de que recuperen su conciencia y obedezcan antes a su conciencia que a la orden del pecado. La Iglesia, defensora de los derechos de Dios, de la ley de Dios, de la dignidad humana, de la persona, no puede quedarse callada ante tanta abominación. Queremos que el Gobierno tome en serio que de nada sirven las reformas si van teñidas con tanta sangre. En nombre de Dios, pues, y en nombre de este sufrido pueblo, cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno, en nombre de Dios: ¡cese la represión!"


Realmente, con Monseñor Oscar Romero, Dios pasó por el Salvador.

lunes, 21 de marzo de 2011

Siempre hay un motivo.....

Cuando la oscuridad inunde tu día. Cuando no entiendas el motivo por el que debes levantarte por la mañana. Cuando tus ilusiones, tus proyectos, tus sueños se hundan.... y te veas atravesando el desierto. Un desierto dónde no te imaginaste, un desierto que no buscaste pero el cual te toca atravesar. Cuando te veas entre escombros y te toque empezar de nuevo a construir...

Confía... "abriré caminos en el desierto"dice el Señor a Isaías.

No te rindas. Quiérete. Cuidate y deja que te cuiden.

Llora con tu gente, llora con tu Dios. Pero no pierdas la Esperanza.
Y recuerda que el sol se pone y sale todas las mañanas.

Que la cruz es signo de esperanza y de fe. Que cuanto más perdido y triste te encuentres más fuerte te agarra Dios de la mano.

Ese Dios que acompañó tu vida al nacer, al crecer, al enamorarte, al compartir con tus amigos y tus hermanos, con tus padres y tus abuelos... ese Dios que te aguantaba en tus horas de estudio, que te alentaba cuando se te atravesó el carnet de conducir, ese que te acompañaba mientras paseabas solo por Granada o de noche por tu playa... ese del que das testimonio con ilusión... ese Dios sigue ahí. Pendiente de ti y de tu vida. Llevando la cruz contigo, sosteniéndote y enjugando tus lágrimas.
Confía...

La desolación es pasajera. Tardará más o menos en dejarte. Tardarás más o menos en encontrar tu nuevo camino. Pero la consolación acabará llegando y volverás a sentir VIDA para, de nuevo, dar VIDA.
Mientras tanto, confía.

Ten paciencia amigo mío. Repítetelo a diario, descansa en los amigos y busca luces, aun tenues y parpadeantes, que acompañen la senda oscura que te toca recorrer.

Como decía Santa Teresa de Jesús, "la paciencia todo lo alcanza".

Créetelo, de verdad, créetelo.

Escribe con fuerza, sé valiente, haz tuyo esto que escribes y cuando lo leas... confía.

Cómo lo haces ahora, en este paréntesis, en este descanso que tu mente y tu corazón te estan regalando... haz tuyo este mensaje. Y repitelo entre el llanto. Y mientras llores, mientras te lo repitas, no dejes de caminar...
Confía...

Aunque no lo sientas, aunque ahora no lo veas, la vida es maravillosa.

Siempre hay algo por descubrir, alguien por conocer, un motivo para reír o buen plato que cocinar.

Siempre hay un motivo para VIVIR